El deseo de comunicarnos con los muertos y con un Más Allá lo hemos tenido desde que el ser humano existe. Hay referencias acerca de la comunicación con los muertos desde el Antiguo Egipto e incluso en el Nuevo Testamento.
Y para ello hay un tablero (al que se le llama maldito) del que no podemos asegurar si es autentico, una invención, un juego, o diabólico.
Si, lo habéis acertado, nos referimos a la Ouija.
Personalmente tenemos el máximo respeto sobre el contacto con espíritus y el más allá. Así que nuestra intención es aportar información desde un punto de vista neutro sin querer dar a entender si su uso es correcto o incorrecto.
Comencemos...
El tablero suele contener las palabras sí, no, adiós, todas las letras del abecedario y los números del 1 al 0 y algunos de los consejos mas frecuentes serian los siguientes:
- Los participantes deben ser por lo menos tres.
- Tienen que colocarse en círculo alrededor de una mesa de madera.
- Ninguno debe ser escéptico: todos deben creer que lo que va a suceder es real para que las cosas salgan bien.
- Uno debe ser el médium, el guía que se va a comunicar con los espíritus. No importa su sexo ni edad pero debe tener capacidades o dones psíquicos. Siempre debe haber alguien que sepa, que tenga los pies en el suelo y no lo tome como un juego. La ouija no es ningún juego.
- Todos deben tocar la plancheta, o puntero, con los dedos (también vale un vaso de cristal boca abajo).
- Se debe recitar una oración o invocación antes de empezar.
- Hay que concentrarse para que funcione.
- Supuestamente pueden aparecer todo tipo de entes, buenos y malos, demonios... pero solo si los que participan creen en la existencia del mal. Si tu crees que va a aparecer algo maligno, es posible que se manifieste. Es la energía que se mueve en el círculo, la que emiten los participantes, la que determina esto.
- Se pueden realizar todas las preguntas que se quiera, no hay limitaciones. Aunque tal vez la respuesta recibida, a la pregunta enunciada o la que te gustaría escuchar, no sean la misma.
- Hasta que no lo permita el médium, nadie puede romper el círculo ni levantarse de la mesa.
- Antes de terminar, hay que despedirse.
Los mas escépticos dirán que el movimiento del puntero puede deberse a dos motivos:
- Simplemente uno es el bromista que hace un movimiento intencional de una manera suave para que parezca que es producto del esfuerzo colectivo.
- Otra por miokinesis: a la hora de tocar un objeto inerte, por una pulsión muscular que tenemos en el dedo, producimos un espasmo inconsciente que podría moverlo.
¿Sabemos si existen o no los fenómenos extraños producidos por la ouija? Podríamos separarlos en dos grupos:
- Los escépticos: Que dicen que no se mueve nada, a los cuales no hay que tener muy en cuenta ya que el fenómeno existe, otra cosa es su origen.
- Los creyentes: Que dicen que sí, pero por dos causas diferentes:
- La primera es porque que creen que es alguien del Más Allá quien mueve el vaso
- O los que piensan que es alguien vivo que participa en el movimiento.
Orígenes
La ouija se desarrolló en el clímax del espiritismo, un fenómeno de masas que tuvo lugar en Occidente en la segunda mitad del siglo XIX a raíz de la publicación de El libro de los espíritus de Allan Kardec, que se dedicó al estudio de fenómenos paranormales, en particular, a las manifestaciones de las mesas giratorias o parlantes, precursoras de la ouija. Estas mesas golpeaban el suelo para indicar sí o no. Es un fenómeno que se conoce como macropsicoquinesia, la capacidad de la mente para influir en los objetos materiales.
Las posibles explicaciones a las causas de estos fenómenos, al igual que las teorías filosóficas, sentaron las bases del espiritismo. Para saber más acerca de su doctrina es recomendable leer las siguientes obras:
- El libro de los espíritus. 1ª edición: 18 de abril de 1857
- El libro de los médiums. 1ª edición: enero de 1861
- El evangelio según el espiritismo. 1ª edición: abril de 1864
- El cielo y el infierno o la justicia divina según el espiritismo 1ª edición: agosto de 1865
- La génesis, los milagros y las profecías según el espiritismo. 1ª edición: enero de 1868.
La ouija fue una evolución del espiritismo y, supuestamente, fueron los espíritus los que guiaron a sus inventores hasta su creación, indicándoles su nombre y la forma y contenido que debía tener el tablero, así como su funcionamiento.
Nació en el año 1890 durante las sesiones espiritistas de Elijah Bond, abogado e inventor estadounidense.
El significado y origen de su nombre siguen siendo un misterio hoy en día.
Diversas teorías apuntan que el nombre proviene del francés oui (sí) y del alemán ja (sí). Otros indican que la palabra ouija, venía del egipcio antiguo y significaba buena suerte, lo que hoy se ha negado.
La hipótesis que más se baraja es que la médium de aquella sesión se inspiró en un broche que había conseguido precisamente en Egipto con la imagen de una diosa llamada Ouida.
Fue con el auge del espiritismo y de la práctica de este en el siglo XIX, cuando fueron surgiendo muchos artilugios de comunicación con el más allá, sin la necesidad de tener que pasar por un médium. Según diversos informes, se encontraron numerosas bandejas grabadas con letras y números en las casas en las que inicialmente se descubrió que se practicaba espiritismo en los Estados Unidos a mediados de la década de 1880.
Bond patentó la idea y la convirtió en un juego muy vendido en todo el mundo, especialmente en EEUU. Cuando fue dado a conocer aseguraron que venía del Antiguo Egipto, igual que el nombre.
Un año después de la presentación de la patente para hacer este tipo de tableros, la empresa quebró. Pero dos ex empleados vieron el potencial del objeto, se hicieron cargo del negocio y comenzaron a lanzar una producción a gran escala de la tabla Ouija recuperando los derechos de explotación.
Fueron los hermanos William e Isaac Fuld quienes industrializaron el tablero Ouija, haciéndolo pasar al terreno de los juegos de mesa, y con ello, que acabara con cierto descrédito a los ojos del público. No fue hasta 1912 que un médium la utilizó durante una de sus sesiones, lo que poco a poco lanzó la práctica hasta que estalló en la década de 1920. William Fuld aprovechó la oportunidad para hacer creer a la gente que él era el primer inventor, sin dudar en tomar medidas acciones legales contra cualquier empresa que intentara producir un artículo similar. Murió en 1927, y sus descendientes continuaron produciendo tableros hasta la compra, en 1966, de la compañía por parte del editor de juegos Parker Brothers.
Aunque en España ya no se comercializa, anteriormente lo hizo Borrás, pero decidieron retirarlo fulminantemente de la venta sin ninguna explicación. Pero si podemos encontrar la tabla en la web estadounidense de Hasbro. Cuesta 19'99$ (unos 17€), poca cosa si pensamos que nos puede servir para comunicarnos con nuestros antepasados. El texto de presentación no deja lugar a dudas se recomienda a niños de al menos 8 años de la siguiente manera:
¡Entra el mundo de lo misterioso y lo incomprensible con la tabla de Ouija! Tienes preguntas y el mundo de los espíritus tiene respuestas… ¡Y la extraña tabla de Ouija es tu forma de conseguirlas! ¿Qué quieres saber? Haz tu pregunta con un amigo y usa la tabla, pero sé paciente y concéntrate porque no se puede meter prisa a los espíritus. ¡Trata la tabla de Ouija con respeto y no te decepcionará.
Hacer la ouija conlleva una serie de peligros
En Europa, por presiones de la Iglesia Católica, que ha lanzado muchos ataques a los seguidores espiritas, se les ha tachado infinidad de veces de frikis, estafadores o farsantes a los practicantes de estas sesiones.
Principalmente, se inicia su práctica en la adolescencia, quizá porque se teme menos a la muerte, se la reta, o se tiene una mentalidad mas curiosa y abierta. Y siempre cabe la pregunta: ¿y si el espíritu que acude es maligno?
Otras veces, las personas que participan entran en un estado tal de sugestión que puede llegar a desencadenar algún tipo de brote psicótico ya latente en la persona.
Otra explicación que se ofrece desde la parapsicología es la impregnación psíquica. Donde ha sucedido algo terrible, después pueden surgir energías que encuentran a una persona convirtiéndola en el canal. Esta teoría no ha sido demostrada por lo que no es 100% fiable.
Fruto de todo ello, han nacido muchas leyendas negras que rodean a esta tabla, como determinadas muertes asociadas a la actividad y práctica de la ouija que han alimentado la imaginación de muchos y la racionalidad de muy pocos, promovidas por los mas contrarios o escépticos.
Leyendas
Comencemos por algunos casos supuestamente relacionados:
Sucedió en el año 2000 en la Universidad de Arkansas. Tras concluir sus clases, un grupo de amigos decidió reunirse en la biblioteca para estudiar, esa fue la excusa que le dieron al jefe de estudios. Quizás porque concluyeron pronto o por aburrimiento a uno de ellos se le ocurrió jugar a la ouija. Fue una chica llamada Brenda, de 19 años, la que comienza a consultar al tablero con la primera pregunta: ¿a qué edad voy a morir? y ¿de qué voy a morir?
El ese momento el puntero comenzó a moverse y marcó el número 2 y después el número 6, era el 26. Tras ello fue formando una palabra, letra a letra deletreó anorexia; la chica rompió a llorar pues desde hacía más de un año padecía de dicha enfermedad.
Casualidad o no, siete años después, Brenda moría de un ataque cardiorrespiratorio debido a los continuos vómitos y por anemia aguda.
En España sucedieron dos tragedias destacables.
La primera fue la de Estefanía Gutiérrez, una joven de Vallecas de 14 años que murió en 1992 después de hacer ouija. Tras experimentar una serie de sucesos extraños en su casa: ruidos, golpes, vasos que se movían o estallaban... La familia tuvo que llamar a la policía y el informe de los agentes, de los pocos que existen de estas experiencias, explica lo que vieron: un armario que se abrió solo, un crucifijo que se dio la vuelta, una especie de fuego que quemaba una foto de la fallecida... Es uno de los casos más terribles que se conocen.
El segundo ocurrió en Valencia en 2007.
Cinco chicos se reunieron para hacer una sesión de ouija en un edificio abandonado. El que hacía de médium preguntó al espíritu: ¿hay alguien que no quieras que este aquí?”. Y el puntero comenzó a moverse deletreando los nombres de tres de los cinco chicos que habían acudido a la cita. El tablero les dijo que se fueran. Así lo hicieron y fueron a un descampado cercano, al salir de la casa sintieron un sonido fortísimo, ensordecedor... Miraron atrás y vieron con horror como la casa se derrumbó y sepultó a dos de sus amigos que encontraron la muerte en aquella sesión maldita.
Otro caso ocurrió en EEUU un lejano mes de Diciembre de 1972. Jennifer Lyan, una chica de 16 años, se reunió con otra amiga a la que gustaban este tipo de juegos. Le habían regalado un tablero ouija y le propuso jugar con ella y el más allá.
Jennifer acudió a su casa y ambas se encerraron en la vieja buhardilla. Una vez situadas decidió formular las preguntas más consultadas al tablero: ¿a qué edad voy a morir?¿y de qué?.
El puntero comenzó a moverse y señaló dos cifras: el 1 y el 8 formando el número 18, tras ello la E, S, T, R, A, N, G, U, L, A, D, A...,estrangulada. Se asustaron, pero al poco comenzaron a reírse y exclamar: ¡Es sólo un juego!.
El 28 de Marzo de 1974, dos días después de su cumpleaños, el cadáver de Jennifer apareció, había sido violada y estrangulada en un parque cercano a su domicilio tras pasar un rato con unos amigos, nunca se encontró al asesino.
Todos estos relatos, datos y opiniones son simplemente un primer atisbo de lo que se puede descubrir rascando la superficie del tema. Como siempre, y para todo, cada cual es libre de pensar y opinar lo que crea conveniente, dar credibilidad o no a todas estas experiencias, pero a titulo personal y desde el cariño os digo...no siempre ese ruido que escuchamos por la noche van a ser las tuberías crujiendo.
Esperamos haber aportado nuestro granito de arena y, como siempre, ha sido un placer.
Ash2Ash Mystic